Industria de aditivos alimentarios aumentó un 10% sus ventas en Europa

Con un aumento del 27% en la facturación en comparación con el año anterior, la tendencia refleja un claro desplazamiento hacia productos derivados de fuentes vegetales.

El 2023 marcó un hito significativo para el sector de aditivos alimentarios, con un notable incremento del 10% en las ventas, culminando en 880 millones de euros. Este crecimiento se sustenta en una mayor demanda de productos naturales y saludables por parte de los consumidores.

Según datos recientes del Observatorio DBK de Informa, la evolución del sector ha sido impresionante, con un aumento del 27% en la facturación en comparación con el año anterior. La tendencia refleja un claro desplazamiento hacia productos derivados de fuentes vegetales, en contraposición a los aditivos sintéticos.

El análisis del sector también reveló una mejora en la rentabilidad en 2023. Esta mejora se atribuye a la estabilización de los precios de las materias primas y la energía, elementos cruciales que habían experimentado alzas significativas en períodos anteriores.

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La orientación exportadora de la industria sigue siendo robusta, representando el 63% de la facturación total en 2022. La Unión Europea se mantiene como el destino principal para estos productos, consolidando la posición de España como un jugador clave en el mercado europeo.

Actualmente, el sector cuenta con aproximadamente 150 empresas entre fabricantes e importadores, empleando a alrededor de 1,800 personas. Esta cifra destaca la importancia y el impacto económico del sector en el ámbito laboral nacional.

Dentro del mercado, predominan las empresas de tamaño mediano y pequeño, la mayoría bajo propiedad española. Sin embargo, también existe un segmento significativo de grandes empresas, muchas de ellas subsidiarias de conglomerados multinacionales.

El impulso hacia productos más naturales y menos procesados es evidente en el desarrollo y la innovación de nuevos aditivos que cumplen con los requisitos de sostenibilidad y salud exigidos por los consumidores modernos.

Este panorama promete un futuro prometedor para el sector de aditivos alimentarios en España, donde la innovación y la adaptación a las nuevas tendencias de consumo seguirán siendo claves para su crecimiento y consolidación en el mercado global.

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