Normatividad: El impacto del Shiga E- Coli

Aunque algunas de estas toxinas son inofensivas, las temperaturas de almacenamiento, los ambientes inocuos para el tratamiento de los productos y lograr pruebas de diagnóstico independientes del cultivo, puede evitar un riesgo de infección. Muchos mitos giran alrededor de la afectación de la toxina Shiga E Coli. La aplicación de buenas prácticas de manufactura e higiene en los procesos de sacrificio de los animales, reduce las posibilidades de una afectación en el consumo humanos. El reto de la industria:  reducir los riesgos e identificar los tipos de STEC. "Tí­picamente el consumidor, que no necesariamente es microbiólogo, asume que cuando consumen un alimento contaminado, va a generar diarrea al dí­a siguiente. El E- Coli necesita un tiempo de incubación y no actúa de la misma manera. Por esto, debe haber mayor cuidado y seguimiento por parte de las industrias al momento de hacer muestreos de lotes", explica Alexandra Calle, profesora e investigadora de la Texas Tech University. En Estados Unidos hay planes de muestreos, regulado por el gobierno, adicional del seguimiento que hace la industria. Las frecuencias de los muestreos dependen del tamaño de la empresa, que equivale al número de animales que se van a sacrificar. En Colombia, los procesos de seguimiento son cada vez mejores, sin embargo, la rigurosidad en los procesos, dependen directamente de las industrias. Regulaciones: Las regulaciones tiene que ver aplicación de prácticas de higiene muy exclusivas para el sector cárnico, mientras la industria cárnica sea capaz de aplicar estas prácticas, es muy viable que se haga el control de microorganismos. Es importante prevenir que los animales que entren al sacrificio, entren sucios.